Componentes y beneficios de la lactancia materna
Puede que ya has decidido si quieres dar el pecho, puede que todavía no. En este artículo quiero dar información sobre los beneficios para el bebé y su madre para poder tomar una decisión informada.
Desde el calostro que recubre y sella el revestimiento del estómago de un recién nacido, hasta la leche madura que ayuda al bebé a crecer fuerte, cada gota de la leche materna contiene miles de componentes beneficiosos, que incluyen:
Anticuerpos para proteger contra enfermedades;
Hormonas que promueven la vinculación y regulan el apetito;
Células madre que pueden apoyar el desarrollo y la reparación de órganos;
Glóbulos blancos que combaten las infecciones;
Bacterias beneficiosas que protegen el sistema digestivo del bebé
Prebióticos llamados oligosacáridos que apoyan un intestino sano;
Ácidos grasos de cadena larga para ayudar a desarrollar el cerebro, el sistema nervioso y los ojos del bebé;
Enzimas para apoyar sus sistemas digestivo e inmunológico;
Nucleótidos y hormonas que ayudan a desarrollar patrones saludables de sueño-vigilia;
Uno de los grandes beneficios de la leche materna sobre la fórmula es que es un fluido vivo. Se adapta a las circunstancias cambiantes del bebé. Entonces, si el bebé se enferma, el cuerpo de la madre produce glóbulos blancos y anticuerpos adicionales que viajan a la leche y ayudan a combatir las infecciones.
Aparte de sus beneficios para la salud de ambos, la lactancia materna también es muy práctica: la tienes siempre contigo, siempre está a la temperatura adecuada, es higiénica, tu bebé determina cuánto beber y, además, es gratis.
Beneficios para el bebé
Protege del síndrome de muerte súbita del lactante.
Transfiere los anticuerpos de la madre al bebé, tanto los obtenidos de una vida de exposición a enfermedades como anticuerpos específicos para combatir cualquier enfermedad que se encuentre actualmente en el entorno familiar; Por tanto tienen menos otitis, infecciones respiratorias, neumonía y bronquitis, meningitis e infecciones estomacales que los bebés alimentados con fórmula.
Tiene componentes que ayudan a madurar su intestino inmaduro, previendo problemas gastrointestinales y enfermedades crónicas (obesidad, cardiovasculares, asma, alergias).
Se digiere fácilmente lo cual causa menos problemas de diarrea y estreñimiento. Los bebés amamantados suelen tener menos gases, cólicos y regurgitaciones.
Se adapta a las necesidades nutricionales del bebé a medida que crece.
Favorece el desarrollo cerebral: Los bebés amamantados tienen un coeficiente intelectual más alto;
La succión del pecho fortalece los músculos faciales del bebé y ayuda a alinear mejor los dientes del bebé lo cual favorece el desarrollo del habla y reduce la necesidad de aparatos de ortodoncia más adelante en la vida.
La leche materna contiene endorfinas, un analgésico natural, que puede ayudar al bebé a sobrellevar vacunas, dentición y golpes y moretones en la niñez.
Beneficios para la madre
Ayuda a perder peso más rápido sin restringir las calorías.
Ayuda con la involución uterina (que el útero vuelva a su tamaño normal después del nacimiento) y previene la hemorragia posparto (sangrado excesivo después del nacimiento).
El período menstrual de la madre suele tardar más en regresar durante la lactancia. Sin amamantar, la regla vuelve alrededor de cinco a ocho semanas. Con la lactancia materna, pueden pasar meses antes de que se reanude la menstruación.
Reduce el riesgo de cáncer de mama, cáncer de ovario y osteoporosis.
Libera prolactina, una hormona que relaja a la madre, reduce el estrés y mejora la calidad del sueño.
Reduce el riesgo de depresión posparto.